Por: John Hudson, marzo de 2018.
Curso de Cambio Climático. Maestría en Ingeniería Geotécnica. Universidad Tecnológica de Panamá.
Era una mañana de domingo cualquiera, donde te levantas con la idea de una gira al Biomuseo. Esta idea me abrió otro sentido al salir de mi hogar y notar los mismos lugares por donde paso el día a día, llenos de biodiversidad. Hasta los pequeños árboles que a duras penas crecen en las aceras hasta los pequeños vecinos, cada uno mostrando una cualidad… ser únicos. El Biomuseo es un sitio que nos adentra en la historia natural. Desde que llegamos su arquitectura y alrededores nos dan la idea de cuan diverso es nuestro mundo. Diseñado por el famoso Arquitecto Frank Ghery que, en mi opinión, nos invita a explorar un mundo lleno de variedades y diferencias. Mostrando en su techo desuniforme que nos hacen pensar en las hojas de un árbol. Una vez adentro tenemos el sentido de haber entrado dentro del árbol con sus grandes columnas y flujo de luz natural divergentes por los paneles del techo. Aquí nos recibe la guía introductoria donde nos explica los orígenes del museo el porque de su forma y el objetivo de su creación, la historia de biodiversidad.
Figura 1. Mural especies y ecosistemas
Una vez se nos entrega nuestro audio guía y su forma de uso, se nos lleva a la primera ala de exhibición donde se nos explica que es la biodiversidad. De aquí pude obtener un significado muy interesante ya que era una idea de lo que tenía: “conjunto de seres vivos y seres biológicos que albergan la Tierra”. Una gran característica de que tiene cada uno, que son únicos, lo que los hace adaptarse a cada situación y ambiente. Pero estas especies necesitan un lugar donde coexistir, un ecosistema, que les garantice los medios para subsistir. Día a día se descubren nuevas especies en nuestro país, muchas especies de plantas son utilizadas para investigaciones de usos en el ámbito medicinal. Para nuestra mala fama una de esas especies está trabajando en la destrucción del ecosistema, alterando todo el sistema en sí. Las ciudades que van creciendo desmesuradamente y sin control invaden el hábitat natural, y estas al no poder adaptarse a los nuevos cambios van desapareciendo.
Figura 2. Estante “Nuevos descubrimiento de especies”.
Figura 3. Grado de extinción de una especie escala color.
Después de esta exhibición nos adentramos a un cuarto de video en 4 dimensiones donde se nos presenta un cortometraje llamado PANARAMA. Este nos lleva en 6 minutos por un viaje de frontera a frontera y de costa a costa mostrado parte de la biodiversidad de nuestro país. Si alguno no era consciente de la belleza de su país ya sea por falta de tiempo de visitarlo o por desinterés de seguro que este corto levanto el interés de muchos y creo conciencia de la vulnerabilidad de nuestro hábitat.
Nuestra travesía continua por el Biomuseo, y esta nos lleva a la datación geológica del tiempo de la Tierra y el surgimiento de los continentes. Lo primero que nos muestran es una roca, la más antigua encontrada en Panamá hasta ahora, hallada en el área de Veraguas el cual consistía de un basalto. Más adelante, encontramos una exhibición de esculturas en tamaño real de especies que existieron en nuestro continente americano. El cual me llamo mucho la atención el tamaño y formas de sus colmillos, garras, picos y demás que utilizaban para defenderse o subsistir.
Figura 4. Monitor que desplegaba especies según el área donde habitaban
Y ahora que terminamos la primera ala, seguimos a un área libre, en mi opinión una de las que más llamó mi atención, ya que siempre me ha interesado saber como vivieron nuestros primeros habitantes. Aquí se muestra la evolución del pueblo panameño a través de los tiempos, desde que eran grandes cazadores a grandes ejecutivos de empresa. Siempre trabajando en conjunto para sobrevivir y adaptarse a los cambios. Pero también como ha ido destruyendo el ambiente donde vive, contaminando y construyendo sin control el lugar de otras especies.
Figura 5. Paleoindios en actividad de caza.
Continuamos nuestro recorrido hacia la sala de fósiles encontrados en Panamá, aquí vemos dientes de megalodón encontrados en Colón, en la formación Gatún. En la mayoría son de crías jóvenes ya que al parecer las hembras utilizaban las aguas ricas en nutrientes de nuestro país para dar a luz aquí. En la formación Chagres se encontró un fósil de un delfín muy diferente a las especies que se ven hoy en nuestra área. También en la misma formación se encontró un fósil de Marlin.
Este sitio que, aunque la chica guía nos explica esta aun en desarrollo, se nota el gran potencial que tendrá. Nos muestra los hallazgos arqueológicos de aquí de nuestro país y cuanto rica fue nuestra biodiversidad. En un futuro se nos comenta que contara con peceras con diversidad de especies de nuestro país entre otras novedades.
Pero a pesar de estos faltantes fue un área muy interesante del Biomuseo, de aquí pasamos a un receso a la tiendita el cual se hace el llamado a apoyar ya que es una forma el cual se sostiene el Biomuseo.
Figura 6. Fósil encontrado en Formación Chagres.
Figura 7. Dientes de megalodón encontrados en la formación Gatún.
Como último lugar de nuestra visita, nos fuimos con la intención de visitar la galería de Frank Gehry. En lugar de esto nos encontramos una exhibición temporal de murales que muestras los tipos de aves que vuelan el territorio de Panamá. Los tipos de aves son las rapaces, playeras y canoras, se muestra como esta emigran y como usan de puente nuestro Istmo. Además, en toda la pared se muestra el porcentaje que sobrevuela nuestro país de cada especie de aves.
Figura 8. Dientes de megalodón encontrados en la formación Gatún.
En conclusión, se les invita a realizar una visita al Biomuseo ya sea en familia, amigos o en pareja ya que este nos invita a conocer nuestra biodiversidad a como conservarla y mantenerla para nuestras futuras generaciones.