Por: Bernardo Jaén. 2017 (abril).
Curso avanzado de Cambio Climático y medidas de adaptación. Maestría. Facultad de Ingeniería Civil. Universidad Tecnológica de Panamá. Panamá.
Una visita que realizamos al área de Guararé a inicio del mes de febrero de este año, nos motivó a redactar este breve artículo, al observar la situación ambiental que por años ha tenido el área.
Figura 1. Panorama predominante del área de Azuero. Febrero, 2017.
Dado que la región del Arco Seco presenta un clima de sabana tropical y un promedio anual de precipitación de 1 054 mm. En la época lluviosa, se muestran periodos de sequía hasta de 20 días. Los periodos de sequía más prolongados se han presentado coincidentemente con la aparición del fenómeno de El Niño. Los bajos niveles de precipitación registrados están causando una baja significativa en los caudales de los principales ríos de la región y de igual forma, efectos negativos en las áreas de pastoreo utilizadas en la ganadería y la disponibilidad de agua para su uso en actividades agropecuarias, industriales y domésticas. Se observa que el uso de las tierras corresponde a su uso vocacional, por lo que los problemas de degradación de suelos observados, están asociados a inadecuadas prácticas de manejo, como la tala y quema, el sobre pastoreo, otros. (1 Jorge Castillo M. Ana E. Patiño M. Diagnóstico y propuesta de desarrollo sostenible del Arco Seco de Panamá, 2012).
Buscando información sobre el tema nos encontramos con varios documentos y/o artículos relacionados con esta temática, y los cuales se hacen recomendaciones al respecto.
Pero a pesar de esa situación el problema persiste, ya que parece no haber autoridad que tome cartas en este asunto. Lo cierto es que, el problema no es nada fácil de abordar, ya que cualquier medida de corrección que se tome, no se llevará a cabo sin involucran a toda la comunidad, de igual manera el tiempo requerido para que la naturaleza se recupere es también importante. ´
Figura 2. Cauce del río Tonosí, en la provincia de Los Santos. Abril, 2017.
En contraste con esta región del país existen otras que les sobra el agua, como la cuenca del rio Bayano en la Provincia de la Panamá y la del rio Indio en la costa oeste de, Colón.
En los últimos años la situación se ha ido agudizando, según información de hace más de una década, la temperatura media anual oscilaba entre los 26,6 a 27 grados centígrados. Hoy en día cualquier ciudadano de esa área puede afirmar que las mismas oscilan sobre los 30° o 35°Celsius, lo cual es motivo de preocupación para todos los habitantes de estas zonas del país. Eso lleva a replantear la manera de construir las viviendas, los tipos de cultivos que puedan plantarse en el área, la dificultad para brindarle el agua a la población, entre otros problemas.
En esta línea de pensamiento, la ANAM (hoy MiAmbiente) ha identificado a través de talleres de consulta, ciertos instrumentos para hacer frente a los problemas de desertificación y degradación de la tierra en el país, los cuales son:
Figura 3. Zonas costeras vulnerables al Cambio Climático, 2008.
1. Concienciación y educación ambiental.
2. Financiamiento e inversiones urgentes.
3. Marco legal.
4. Ataque a la pobreza.
5. Participación ciudadana.
6. Estudios e investigaciones científicas.
7. Coordinación interinstitucional y fortalecimiento de las instituciones.
8. Integrar un nuevo estilo de desarrollo sostenible al proceso de crecimiento económico.
Frente a esta realidad que aqueja a nuestro país, urgen políticas de estado que enfrenten la situación de manera científica y coherente. Ya que los programas de gobierno pareciera que no han logrado mejorar la situación ambiental de esta zona del país.
Opiniones de personas consultadas.
Profa. Norma De León
Inga. Diana Velasco
¡Buenas noches!
Considero que el artículo es muy interesante, pues deja en evidencia que nuestro país no es ajeno a los fenómenos globales que afectan el clima, y ya en esta zona del país se ha tenido afectación por el fenómeno de la desertificación.
Es importante considerar que aunque muchas veces para poder afrontar los problemas globales que nos aquejan se requiere de acuerdos de cooperación internacional, también es cierto que cada uno de nosotros podemos contribuir a mejorar las condiciones de nuestros recursos naturales con la implementación de buenas prácticas ambientales, tales como la reforestación de los bosques, el uso controlado de fertilizantes y pesticidas y la implementación de la agroforestería entre otros.
Para poder percibir un cambio debemos ser entes multiplicadores de los conocimientos ambientales, de manera que eduquemos a las demás personas que se encuentran en nuestro entorno y así ir sumando seres humanos respetuosos de los recursos naturales, los que contribuirá a poder alcanzar un desarrollo sustentable.
Dr. Eustorgio Jaén
Como artículo opino que está muy bien redactado y se ajusta las ideas ambientalistas actuales. Pero me gustaría darte una visión más técnica y talvez crítica sobre el tema del agua, no es para que cambies el artículo (porque está bien) si no para que tengas otros elementos de discusión. En realidad no hay cambios significativos en la precipitación según las estadísticas disponibles de las últimas cuatro décadas y los fenómenos climatológicos siempre han existido. Percibimos que hay escases de agua (que hay menos) porque el uso del agua ha aumentado y la cantidad disponible se mantiene. Es decir, en las últimas tres décadas también creció el uso de agua para uso agrícola, pecuario, para consumo humano y otras actividades, pero la disponibilidad natural del agua (la oferta) se mantiene igual. Pero si hay deterioro notable de la calidad del agua de los ríos y quebradas debido a malas prácticas agropecuarias. De cualquier forma, es necesario mejorar los procesos de producción, establecer ciertas restricciones y restaurar la cobertura forestal de las cuencas altas de los ríos. Pero, sobre todo, se requieren construir las infraestructuras adecuadas para que el agua, que es muy abundante en la época lluviosa, se pueda almacenar para suplir el déficit de la estación seca. Lo que quiero decirte es que, existe un grave problema administrativo del agua.